un cuento

Pistolas

Entonces volvió a pasar. Ella llegó con la prisa de una tarde ausente de todo, los ojos apenas visibles tras un raro flequillo con forma de ciudad. Se bajó los pantalones y me hizo el amor. Digo me hizo porque entre el ver difuminadas sus blancas piernas desnudas y sentir que un breve temblor espasmeaba mis piernas apenas pasaron dos minutos. Ella vino, me hizo el amor y no pude entender nada.

Nunca entendía nada, la verdad. Ni ella se molestaba en explicarme o hablarme, al menos. Y no debo sentirme mal por ello ya que, salvo el mantener su flequillo tapándole perfecto los ojos, nada parecía importarle demasiado. Supongo que para ella la vida era como un fósforo encendido entre sus dedos; sabía que podía apagarse o quemarle la piel pero lo dejaba consumirse con una parca ausencia de mirada y de todo. Nada más opuesto a mi hipocondríaca visión del mundo. Quizá por eso se fijó en mí, por la cuestión aquella de los polos opuestos que se atraen, aunque lo más probable es que solo haya decidido echarse un polvo conmigo y luego otro y luego siete y seis y nueve. Todos igualitos, además. Todos sin mí.

Parada en la ventana me hizo recordar una canción. La silbé mentalmente por mi costumbre de ocultar las cosas importantes. Qué rica eres debí decirle pero en cambio silencio, malditas sean las noches desveladas con una lucecita roja como un parque entero, caminar a solas entre discos de vinilo es privilegio de pocos, menos yo. Todo eso debí decirle o al menos qué rica eres. Callé una, dos, siete, seis y nueve veces. Parada sobre la ventana dejaba que el fósforo se siguiera consumiendo. Me ardían los labios de no decir nada.

Cuando llegó la policía apenas pude recordar que la conocí en el Yacana bailando Soda Stereo. Recordé también que nunca había visto a mi abuelo y tuve una erección al bajar corriendo las escaleras mientras ella, siempre delante de mí, gritaba “más rápido, huevón”. No tuve tiempo de rescatar el cheque al portador de mi último trabajo ni el saxofón que siempre quise tener. Sí en cambio muchas pastillas azules que son las mejores cuando huyes de la policía. Eso dicen las instrucciones.

Faltaba un piso para llegar al infierno cuando el súbito deseo de ser un hombre bueno se inyectó en mi columna vertebral. La empujé con fuerza hacia el cemento y le dije esta vez será como yo quiero. La sorpresa en sus ojos brilló a través del flequillo aunque duró un segundo, quiso oponerse y un hombre bueno le golpeó la frente con un puño resucitado. No volvió a mirarme, en cambio se bajó los pantalones –esta vez lo vi clarito- y me apretó entre sus piernas como quien mata un grillo a media noche.

Al terminar, sabía que sería mi mujer para siempre y que, tras matar algunos policías, saldríamos adelante hacía un futuro lleno de luces y esperanza tal como lo manda El Señor.

¡Bang Bang! Dice el arma y todo se hace claro. ¡Bang Bang! Y su flequillo se ve hermoso entre los óleos de tanta sangre.

Las Niu Guonders - Primera Parte

Muchos habrán entrado a esta página por su cuenta, bien cumpliditos y patrióticos con sus mp3 de Gianmarco y un pisco sour en la mano para votar por Macchu Picchu como una de las 7-nuevas-maravillas-del-mundo-mundial-de-aquí-hasta-el-horizonte-y-más-allá-etcétera-etcétera. Otros habrán entrado porque se los dijeron. Otros más habrán entrado porque no tenían nada que hacer, les llegó altamente y votaron al Cristo del Corcovado porque sale en todas las novelas brasileñas o a Stonehedge por todo el asunto de los marcianos y la hechicería y sabrá CHUCK! qué más.

Pues bien, dama, caballero, señor, señora, señorita, joven, y tú también, Timmy, en mi Humilde Opinión (con mayúscula, que tampoco es poca cosa), la lista de New7Wonders cumple con todos los requisitos de rigor, más algunos méritos adicionales, para clasificar en el estante de las Más Grandes Basuras de Todos los Tiempos (o incluso abrir las Nuevas Más Grandes Basuras). La mitad de sus "maravillas" parece que escondiera silos para misiles en las torres. Otra mitad está hecha de puras estatuas sin más mérito que ser grandotototas y viejotototas. Por si fuera poco, hay una mitad más que está incompleta y alguien olvidó enseñarle lo que significa una línea curva a los que hicieron la otra mitad. Todo suma un 200% de basurismo puro.

Por eso no vengo a robarle y a torcer su brazo, soy un hombre nuevo que ha dejado el mal camino y ha encontrado al señor... Zulu, al capitán Kirk y a Spock en un DVD de aniversario de Star Trek. Pero ese no es el punto. El punto es que hoy les traigo estas lindas Verdaderas Nuevas 7 Maravillas del Mundo. ¡Qué digo "mundo"! ¡Estas son Maravillas del Multiverso!

1. El DeLorean de Volver al Futuro

Cuando el doctor Emmett Brown sufrió un accidente en el baño que llevó a su subconciente a idear un aparato capaz de torcer las leyes de la física, las barreras interdimensionales, y que cabía cómodamente en el tablero de un DeLorean DMC-12, se hizo magia. El condensador de flujos, un bicho tecnológico que permite a 88 millas/hora (algo así como 140,8 km/h) lo que algunos científicos sólo consideraban posible por encima de la velocidad de la luz. ¡Y no sólo eso, sino que permitía viajar en ambos sentidos, usando el mismo vehículo, a la misma velocidad, con el mismo sentido y el mismo tablero con números LED de colores.

Por si fuera poco, el aparato tiene incorporado un Mr. Fusion del año 2015, un reactor de energía nuclear casero que usa basura para generar fusión en frío, y si trato de entender cómo funciona eso me hago bolas. Sumado a esta espectacular fuente de poder, que evita mayores problemas con terroristas libios traficantes de plutonio. Todo sea por alcanzar los 1,21 gigawatts (como 10 millones de focos de 100w) de potencia para nuestro querido condensador.

Y por supuesto, ¿de qué te sirve un automóvil deportivo de lujo capaz de viajar en el tiempo si no puedes tunearlo a tu gusto?

Resumiendo: el DeLorean DMC-12 de Volver al Futuro es una maravilla del mundo que representa tuneabilidad y reacciones nucleares al alcance de los niños.

Eso es todo por hoy, pronto mi segunda propuesta para una Verdadera Nueva Maravilla del Mundo: la tienda del chino Wing de Gremlins.

P.D.: ¿Mencioné que el DeLorean también vuela y las partes hechas para la película están catalogadas oficialmente por la DeLorean Motor Company y se pueden encontrar en su web bajo los términos "hover" "flux" y "fusion"?